Un único ser se divisa en todo el espacio marcado, porque no es más que el desierto lo que se encuentra a tú alrededor.
El día muestra lo que tu cara esconde y quizá sea lo que lo hace tan trasparente; pero en la noche, sólo con tu soledad, no puedes llegar a imaginar lo que puedes encontrarte.
El suelo que pisas, lleno de poros agrietados donde no crece vida alguna, no muestra más que simple vacío, como tu propia vida marcada de sed de compañía, sin nadie más que tu propia sombra, compañera de tus pensamientos que se disipa con tus pesadillas.
El suelo que pisas, lleno de poros agrietados donde no crece vida alguna, no muestra más que simple vacío, como tu propia vida marcada de sed de compañía, sin nadie más que tu propia sombra, compañera de tus pensamientos que se disipa con tus pesadillas.